El presidente de la Federación Mundial de Hemofilia (FMH), César Garrido, después de visitar varios hospitales en Bolivia sostuvo que el acceso a las medicinas para hemofílicos no es suficiente, es muy espaciada y ninguno recibe productos medicamentos de última generación.
“He estado en hospitales de Santa Cruz, Cochabamba y La Paz, conversando con niños y adultos enfermos con hemofilia y veo grandes avances en la atención y compromiso del equipo multidisciplinario; sin embargo, la dotación de medicamentos para los pacientes no es suficiente, es fragmentada en el tiempo, lo que hace que que el tratamiento sea discontinuo y deje secuelas», dijo el galeno.
La hemofilia es una enfermedad rara que impide que la sangre coagule correctamente, lo que provoca sangrados excesivos y difíciles de controlar, lo que causa sangrado en las articulaciones, hinchazón, dolor y rigidez. Dado que el cuerpo no fabrica una cantidad suficiente de una proteína llamada «factor de coagulación”, las articulaciones sangran espontáneamente y su movilidad se hace cada vez más compleja.
El suministro se fija sólo en el factor de coagulación 8 y 9 y no toma en cuenta a las medicinas innovadoras que están actualmente en el mercado hace más de siete años. Esto hay que mejorar de inmediato”, declaró Garrido.
Garrido fue invitado a la Reunión Nacional de Hemofilia, evento que fue organizado por el Ministerio de Salud y Deportes, en coordinación con la Fundación Nacional de Hemofilia, Banco de Sangre y la Asociación de Hemofilia La Paz.
Este escenario sirvió para mostrar los avances y necesidades de los más de 180 pacientes bolivianos que padecen esta rara enfermedad (hemofilia A) que les impide la coagulación de su sangre.
Texto y foto: AH La Paz