En El Alto hay muchas madres que son el sostén de sus hogares, todos los días el motor que las impulsa son sus hijos a quienes quieren ver profesionales, puede ser al frente de un pequeño negocio o detrás de un escritorio
“Ser jefas de hogar o mamás es una responsabilidad grande, yo trabajo y me levanto cuatro de la mañana para cocinar para mis hijos”, dijo Lidia Mamani, madre de familia y mencionó que a veces, en muchos hogares, el esposo fue destinado a trabajar en otra ciudad y las mujeres se quedan cargo de la administración de la casa y educación de los hijos.
María Condori, madre sola de tres hijos, tomó las riendas de su hogar y así sacar adelante a sus seres queridos.
“Soy madre sola, tengo tres hijos y es un sacrificio trabajar, dejar la comida preparada, atender a los hijos, llegar en la noche y hacer nuestras cosas también en la casa, es un poco complicado, pero así mismo salimos adelante. En estos tiempos no hay mujer que no trabaje”, expresó Condori.
Mencionaron que el rol de madre es abnegado, pero eso les da más fuerzas y valentía para seguir y no quedarse atrás y cumplir en muchos casos el rol de madre y padre, cumplir el papel de enfermeras, médicos y hasta psicólogas.
Gregoria Mamani y María Condori animaron a aquellas mujeres solas o viudas a no rendirse y seguir adelante, “decirles a las mamás, muchas felicidades, no desmayen, sigan adelante”.
Texto y foto: Gamea